viernes, 2 de septiembre de 2011

Los recortes en Educación nos afectan a todos.

Este conflicto afecta sobre todo a la Enseñanza Secundaría, pero la Enseñanza Infantil y la Primaria de los Colegios Públicos no van a estar exentas de los recortes anunciados por la Consejería de Educación, un tijeretazo sobre otro, siempre sobre la Escuela Pública.

Los padres de los alumnos que van a Colegios Públicos, Institutos de Secundaria o Centros de Formación Profesional estamos de "Enhoramala". Seguramente no habrá clase el primer día lectivo de este nuevo curso que nuestros hijos deberían de comenzar con una ilusión renovada y con las pilas cargadas por el descanso estival.

¿Y quién son los culpables...? Los profesores por supuesto. Así lo ha dado a entender la Consejera de Educación Lucía Figar y nuestra Presidenta Esperanza Aguirre que ha mandado una carta a los "Queridos Profesores de Educación Secundaria de la Comunidad de Madrid" en los que les comunica que debido a la grave crisis económica (que posiblemente la hayan provocado ellos) deben de hacer un esfuerzo y trabajar 20 horas en lugar de las 18 que actualmente trabajan. No hay mayor mentira que las verdades a medias. Los profesores no trabajan 18 horas Sra. Aguirre, trabajan como cualquier empleado público de este país (exceptuando los políticos que son de una casta superior) 37,5 horas semanales cobrando el 7,00% menos de sueldo que el año pasado.

Las 18 horas que "trabajan" son horas lectivas, horas que están delante de sus alumnos, nuestros hijos, motivándolos para adquirir unos conocimientos que les transmiten con pasión y entusiasmo. Pero ¿Que les supone a los profesores dar 20 horas lectivas en lugar de 18? a los profesores nada, a nuestros hijos mucho. Me explico, a los profesores de secundaria les han impuesto dar dos horas lectivas más a la semana y a cambio de este "esfuerzo" se les aumentarán algunos complementos en su sueldo, con lo cual pasarían a ganar más. La Consejería de Educación con esto prevé un ahorro de unos 80 millones de euros, fenomenal si nos lo presentan así, pero este ahorro tiene truco y los perjudicados son nuestros hijos.

La jornada de 37,5 horas a la semana se distribuye en 18 horas lectivas, más las horas de guardias, preparación de las clases, tutorías, corrección de ejercicios, corrección de exámenes, técnicas de estudio, suplencia de profesores porque no mandan a un interino para suplir una baja... Por supuesto cuando hacen salidas culturales programadas fuera del Centro para estudiar o reforzar un tema y su hora de llegada es mucho más tarde de su hora de salida del Centro, eso no se lo reconoce la Conserjería.



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